ANAGORTES, Washington – Dos trenes BNSF descarrilaron el jueves en Arizona y el estado de Washington.
No se reportaron heridos. No está claro qué provocó el descarrilamiento del tren.
El descarrilamiento en Washington ocurrió en una berma en Padilla Bay en la Reserva Tribal Swinomish cerca de Anacortes. La mayoría de los 5,000 galones de combustible diesel se derramaron hacia el agua, según el Departamento de Ecología del estado.
Las autoridades dijeron que no había señales de que el derrame haya llegado al agua o haya afectado a la vida silvestre.
Como medida de precaución, los socorristas instalaron una rampa en tierra y retiraron el combustible restante de los dos motores descarrilados. Cuatro vagones cisterna estaban de pie.
Un tren que transportaba jarabe de maíz descarriló en el oeste de Arizona, cerca de la frontera estatal de California y Nevada. Anita Mortensen, vocera de la Oficina del Sheriff del condado de Mohave, dijo que no estaba al tanto de ningún derrame o derrame.
La portavoz de BNSF, Lena Kent, dijo que ocho autos descarrilaron en Arizona, bloqueando la línea principal. La causa del descarrilamiento sigue bajo investigación y no se sabe de inmediato cuándo se reabrirá el carril.
El descarrilamiento se produce en medio de una mayor atención sobre la seguridad ferroviaria en todo el país luego de un incendio en Ohio el mes pasado y una serie de descarrilamientos que desde entonces han acaparado los titulares, incluso en Michigan, Alabama y otros estados.
Según datos federales, hay un promedio de tres descarrilamientos de trenes por día en los EE. UU., pero relativamente pocos crean catástrofes.
El mes pasado, un Un tren de carga de Norfolk Southern que transportaba productos químicos peligrosos descarriló En East Palestine, Ohio, cerca de la frontera con Pensilvania, se produjo un incendio y cientos de personas fueron evacuadas.
Queriendo evitar una explosión descontrolada, los funcionarios liberaron y quemaron deliberadamente cloruro de vinilo tóxico de cinco vagones de tren, lo que provocó llamas y humo negro que se elevaban hacia el cielo. Incluso cuando los funcionarios sostuvieron que estaban haciendo todo lo posible para proteger a las personas, las personas cuestionaron los posibles impactos en la salud.
