[Crónicas de Conciertos] La M.O.D.A. + The Ponchos en Sala López, Zaragoza (09/05/15)
La noche de este sábado 9 de mayo no podría haberse esperado con más ganas, se avecinaba una tanda de buena música en la ciudad de los leones. The Poncho’s (Zaragoza) Un grupo que realiza versiones muy acertadas de los grandes clásicos del género swing y funk, abrió la veda al buen rollo que se iba a respirar en la Sala López a eso de las 21:30 de la noche, pudiendo disfrutar de algunos temazos atemporales como: I feel good de James Brown, que hizo mover el esqueleto a las más de cien personas que ya estábamos allí, recorriendo otros clásicos llegaron a bajar del escenario para bailar un mambo con los asistentes. Y para terminar lo hicieron con I like The Poncho´s al ritmo de I like a move; despidiéndose así de un público al que hicieron participe del espectáculo.
La Maravillosa Orquesta del Alcohol es un grupo muy original dentro de la escena rockera estatal, con toques que van del blues al country, pasando por otras influencias como la música irlandesa; y que, como ellos mismos asumieron en alguna entrevista, Son más de Eskorbuto que de Mumford and sons. Celebramos su autenticidad en las letras, sus ritmos, y esa voz rota del cantante que le da un sonido propio al grupo, en el que se pueden oír entre otros instrumentos una mandolina, acordeón, un banjo o un saxo. En esta ocasión eché de menos el banjo ya que no estuvo presente, sí lo estuvo y mucho la mandolina.
Sobre las once de la noche saltaba al escenario La M.O.D.A., y lo hacían con muchas ganas y una energía vírica que se contagió sobre el público de la Sala López nada más escuchar los primeros acordes que rompían el silencio.
Vestidos con su ya conocida camiseta de tirantes blanca y delante de su singular logo, arrancaban el concierto con uno de sus temas en inglés: Live Young die old, el mas de un centenar de personas que allí nos encontramos, aplaudimos las ganas que transmitía este sexteto burgalés, venidos a la ciudad del viento a deleitar al publico zaragozano. Presentando su nuevo LP: La primavera del invierno en el que han contado con grandes colaboraciones como la de Gorka Urbizu de Berri Txarrak en PRMVR, que no tardó en sonar en este espacio que, si se me permite el apunte, es para mí uno de los temazos del nuevo disco que no resulta difícil de digerir a pesar de ser un poco mas intimo.
Siguiendo con la presentación de este nuevo disco, tomaron de intro su Nubes negras para dar paso a Miles Davis, canción que nos hizo desear quedarnos a vivir en ese instante como su propia letra indica.
Nos hicieron bailar, saltar y gritar a su ritmo a veces frenético cuando empezaron a sonar canciones ya míticas de la banda como Nómadas o Los hijos de Johnny Cash, (canción con la que decidieron acabar el concierto) pero que también pidieron silencio cuando se acercaban momentos más tranquilos en el tono pero no en el contenido; y es que Hay un fuego empezaba poner los pelos de punta y dar un momento de respiro al publico que disfrutaba cada minuto de concierto.
No faltó Gasoline para ese fuego del que nos hablaban estos músicos tan intensos, ni su Vasos vacíos, canción que el público entonó de principio a fin. 1932 y cambiando de ritmo consiguieron aunar los latidos de los asistentes con “Quien nos va a salvar”.
En resumidas cuentas, no quisiera pasarme de elogios a esta banda, pero he de decir que las casi dos horas de directo se hicieron muy muy cortas, cosa que solo pasa en los buenos conciertos… Y bien es cierto, que hacía tiempo que no me esperaba pasarlo tan bien escuchando música y sintiéndola así. Desde la humilde opinión de un manchego en Zaragoza, os admito repetiría de nuevo experiencia.
Texto: Marta Valero
Fotografía: Rufino González