Beijing
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El presidente chino, Xi Jinping, dijo que Estados Unidos y China deberían ser «aliados en lugar de adversarios» cuando se reunió con el principal embajador estadounidense, Anthony Blinken, en el cavernoso Gran Salón del Pueblo de Beijing el viernes.
La reunión tuvo lugar el último día de la visita de tres días de Blinken. PorcelanaSe produce mientras los dos países continúan buscando estabilizar los vínculos difíciles y ampliar las comunicaciones, incluso en disputas que van desde la tecnología hasta Taiwán.
“China quiere ver un Estados Unidos seguro, abierto y próspero. Esperamos que Estados Unidos vea el desarrollo de China desde una perspectiva positiva”, dijo Ji a Blinken.
«Una vez que se resuelva este problema fundamental… las relaciones entre China y Estados Unidos realmente mejorarán y avanzarán», afirmó. “China y Estados Unidos deberían ser socios y no adversarios; Ayúdense unos a otros a tener éxito en lugar de dañarse unos a otros.
Los comentarios de Xi se producen en un momento en que los funcionarios chinos están tomando medidas que Washington ha tomado frente a una China cada vez más asertiva en nombre de la seguridad nacional, pero que Beijing considera que tienen como objetivo sofocar su crecimiento. Incluye restricciones americanas Exportaciones a China de bienes de alta tecnología con aplicaciones militares, además de restringir la inversión estadounidense en ciertos sectores de alta tecnología en China.
El miércoles, el presidente estadounidense Joe Biden firmó un proyecto de ley que daría lugar a una ley La plataforma de redes sociales TikTok prohibida en todo el país Si Byte Dance, la matriz china de la empresa, no la vende, Beijing ya ha condenado la ley anteriormente.
Blinken dijo a Xi que Estados Unidos está «comprometido a mantener y fortalecer los lazos» con China y «gestionar nuestras diferencias de manera responsable».
Ejemplos de avances recientes citados por Blinken incluyen «restablecer las relaciones entre militares, pensar juntos sobre el futuro de los narcóticos y la inteligencia artificial».
Su reunión se produjo tras cinco horas entre Blinken y su homólogo Wang Yi, que ambas partes describieron como «conceptual y constructiva».
Pero Wang también fue claro acerca de las agudas tensiones que aún existen entre las dos superpotencias del mundo. Mientras continúan sus reuniones, Wang dijo que China y Estados Unidos enfrentan una elección entre estabilidad y una «espiral descendente».
“¿Deberían China y Estados Unidos ir en la dirección correcta, avanzar con estabilidad o volver a caer en una espiral descendente? Esta es una cuestión importante que enfrentan nuestros dos países y pone a prueba nuestra sinceridad y capacidad», dijo Wang a Blinken, y agregó que las relaciones entre Estados Unidos y China estaban «comenzando a estabilizarse» durante una reunión en la Casa de Huéspedes Estatal Diaoyutai.
«¿Deberían nuestras dos partes liderar la cooperación internacional contra los problemas globales y lograr un beneficio mutuo para todos? ¿O involucrarse en competencia y conflicto, o caer en un conflicto en el que todos perderemos?», habló a través de un traductor.
Más tarde, durante una reunión a puertas cerradas, Wang acusó a Estados Unidos de «tomar infinitas medidas para aplastar la economía, el comercio, la ciencia y la tecnología de China» y que las recientes preocupaciones sobre la «exceso de capacidad» industrial de China han inundado los mercados globales.
«(Las medidas estadounidenses) no son competencia leal sino contención, y no eliminan riesgos, sino que crean riesgos», dijo, según una lectura de los medios estatales chinos.
En sus comentarios a Wang antes de la sesión a puertas cerradas, Blinken señaló una «responsabilidad compartida» entre los dos países.
«Creo que podemos lograr algunos avances en las cosas que nuestros presidentes acordaron que debemos cooperar, pero aclarar nuestras diferencias, nuestros objetivos y decirnos claramente cuál es nuestra posición», dijo Blinken.
El viaje es el último de una serie de compromisos de alto perfil que incluyen una cumbre entre el presidente Biden y el presidente chino Xi Jinping en California en noviembre.
El Departamento de Estado de Estados Unidos dijo que las dos partes discutieron los próximos pasos sobre los compromisos asumidos por ambos líderes para mejorar la cooperación antinarcóticos, la comunicación entre militares, las conversaciones sobre los riesgos y la seguridad de la inteligencia artificial y la facilitación de los intercambios entre pueblos. Reunión.
En declaraciones a los periodistas después de sus reuniones, Blinken dijo que los dos países celebrarían sus primeras conversaciones sobre inteligencia artificial y sus riesgos «en las próximas semanas».
Mark Schiefelbein/Pool/AFP/Getty Images
El secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken, le da la mano al ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, en Beijing el 26 de abril de 2024.
'Paz y estabilidad'
El viaje de Blinken Porcelana —la segunda con un año de diferencia— se produce en momentos en que ambos países navegan por espinosos asuntos geopolíticos y regionales. El apoyo de China a Rusia Por su agresión hacia el Mar de China Meridional y Taiwán.
A Entrevista con Kylie Atwood de CNNAntes de abandonar Beijing, Blinken dijo que Estados Unidos había visto evidencia de los esfuerzos chinos para «influir y posiblemente interferir» en las próximas elecciones estadounidenses.
Una de las principales preocupaciones de Estados Unidos es lo que Washington ha descrito como el apoyo de China a la base industrial de defensa de Rusia. Dice Ayudó a Moscú a continuar su guerra contra Ucrania.
Durante su conferencia de prensa, Blinken reiteró las «serias preocupaciones» de Estados Unidos sobre el suministro de China de piezas de doble uso que «fortalecen la guerra ilegal de agresión de Rusia contra Ucrania».
«Rusia tendrá dificultades para mantener su ataque contra Ucrania sin el apoyo de China», afirmó.
Blinken le dice a CNN que Estados Unidos está listo para tomar más medidas. «Eso es lo que le hemos dicho a China: vamos a tomar las medidas que ya tenemos, y si esto no se detiene, vamos a tomar más medidas y, como se puede esperar, otros países (también). »
Beijing ha criticado a Estados Unidos por hacer «acusaciones infundadas» sobre los «intercambios comerciales y económicos normales» entre China y Rusia.
Enfatizó la importancia crítica de mantener la paz y la estabilidad a través del Estrecho de Taiwán y alentó a China a usar su influencia para disuadir a Irán y sus representantes de escalar el conflicto en el Medio Oriente, además de instar a Corea del Norte a poner fin al conflicto. Participar en conductas y conversaciones peligrosas».
Las notas de lectura de China señalaron que las dos partes intercambiaron puntos de vista sobre «la cuestión de Ucrania, el conflicto palestino-israelí, Corea del Norte, Myanmar y otras cuestiones».
Wang pidió a Estados Unidos que «deje de coaccionar a los países de la región» y dijo que la región de Asia y el Pacífico no debería «convertirse en un campo de batalla para las grandes potencias», señalando sus preocupaciones sobre Estados Unidos. Desarrollar relaciones de seguridad con aliados asiáticos de larga data.
En cuanto a Taiwán, Wang repitió la advertencia habitual de Beijing de que «la cuestión de Taiwán es la primera línea roja insuperable» en las relaciones entre Estados Unidos y China.
El gobernante Partido Comunista de China reclama Taiwán como parte de su territorio, aunque nunca lo ha controlado, y en los últimos años ha intensificado las amenazas militares contra la isla democrática.
Rechaza los vínculos no oficiales entre Estados Unidos y Taiwán y las ventas de armas a Taiwán, algo que Estados Unidos está obligado a hacer en virtud de la Ley de Relaciones con Taiwán.
Esta historia y el título se han actualizado para reflejar novedades adicionales.
