El Banco Central Europeo mantiene los tipos de interés en el 4% desde el fin de la división

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El Banco Central Europeo mantuvo las tasas de interés en un máximo histórico el jueves, indicando que considerará recortarlas en su próxima reunión en junio.

BCE dicho Su órgano rector se reunió en Frankfurt y quienes fijan las tasas dijeron que su tasa de depósito de referencia se mantendría en 4 por ciento hasta que las presiones sobre los precios se fortalecieran.

Pero algunas autoridades apoyaron recortes inmediatos.

En un cambio con respecto al lenguaje anterior, el BCE dijo que sería «apropiado» recortar las tasas si las presiones subyacentes sobre los precios, sus pronósticos actualizados y el impacto de alzas de tasas anteriores aumentan la confianza de que la inflación se está acercando a su objetivo del 2 por ciento. Un sistema duradero.»

La inflación de la eurozona cayó al 2,4 por ciento en marzo desde el 10,6 por ciento en 2022, cerca del objetivo del banco.

«Incluso si el anuncio de política no menciona explícitamente junio como el momento para el primer recorte de tasas, creemos que la reunión de hoy debería marcar la última parada antes de un recorte», dijo Carsten Bresky, jefe de investigación macroeconómica global del banco holandés ING.

La presidenta del BCE, Christine Lagarde, dijo a los periodistas que se espera que la inflación se «acomode» en los próximos meses antes de alcanzar su objetivo a mediados de 2025, pero señaló signos de desaceleración del crecimiento salarial: «Los riesgos para el crecimiento económico se inclinan a la baja».

Cuando se le preguntó si la decisión del jueves de mantener las tasas sin cambios fue unánime, dijo que «algunos miembros tienen la confianza suficiente para argumentar a favor de un recorte». Pero dijo que «acordaron unirse al consenso de una gran mayoría de miembros» que querían esperar hasta junio.

El euro, los rendimientos del Bund alemán a dos años sensibles a los intereses y el índice Stoxx Europe 600 se mantuvieron prácticamente estables el día después de la declaración del banco central.

Los operadores en los mercados de swaps, sin embargo, restaron importancia a la perspectiva de que el BCE comience a reducir las tasas del 75 por ciento al 70 por ciento en junio.

Las expectativas de recorte de tasas de los mercados se vieron sacudidas esta semana por datos que mostraron que la inflación estadounidense aumentó más de lo esperado en marzo.

Los inversores han respondido reduciendo sus apuestas sobre un recorte de las tasas de interés de la Reserva Federal, que ahora dicen que hay sólo un 50 por ciento de posibilidades antes de septiembre.

Los movimientos del mercado estadounidense llevaron a los operadores a reducir las expectativas sobre cuántos recortes de tipos harán el BCE y el Banco de Inglaterra durante el año.

Algunas autoridades de la zona del euro, como las del Reino Unido, tal vez quieran evitar recortar las tasas de manera más agresiva que sus contrapartes en Estados Unidos, en parte porque sus monedas se debilitarían y avivarían la inflación.

Pero Lagarde rechazó las sugerencias de que el BCE podría no estar preparado para recortar las tasas ante el banco central. «Nos guiamos por los datos, no por los bancos centrales», afirmó.

Peter Schaffrick, estratega de RBC Capital Markets, añadió: «El BCE ha puesto sus colores en el mástil y ha cambiado su orientación en este momento, con cifras de inflación reales que actualmente no están muy lejos de sus propias proyecciones».